Plaza de la Paz - Organillero y chinchineros Lizana - Cervantino 2015
Plaza de la Paz
Centro Histórico Frente a la Catedral de la Basílica Colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato, Guanajuato, Gto. C.P. 36000
Sàbado 10, 20:00 Hrs.
MÚSICA DEL MUNDO
Organillero y chinchineros Lizana
Patrimonio chileno / Tesoros humanos vivos
El Pacífico: Chile 45 min
= o =
Domingo 11, 12:00 y 20:00 hrs.
MÚSICA DEL MUNDO
Organillero y chinchineros Lizana
Patrimonio Chileno / Tesoros humanos vivos
El Pacífico: Chile 45 min
= o =
* El chinchinero es un personaje popular chileno que lleva en su espalda un bombo el cual golpea con unas varas, además de dos platillos sobre el bombo, que suenan gracias a la acción de una cuerda, atada a un zapato del ejecutante, quien baila acrobáticamente, y también un triángulo que suena de forma aleatoria dependiendo de los movimientos realizados por el ejecutante y su golpe en el bombo.
El Chinchinero nació en la Región Metropolitana de Santiago de Chile. Fue don Lázaro Kaplán quien comenzó esta tradición, en Santiago de Chile en la década de 1920 (puede que incluso un poco antes), cuya función era acompañar al organillo (los chinchineros solos sin organillo son producto de una época en que los organillos chilenos permanecían en mal estado, pues no tenían quién los reparara), y tocaba el chinchín y el bombo apoyado en el organillo (sin bailar). Sus hijas cantaban las canciones que tocaba un organillo (el cual tocaba ¨La danza de la libélula¨, ¨Marinero de las delicias¨ y otras canciones del repertorio de esa época) y él, además del chinchín, se ponía cascabeles. Años después algunos comenzaron a imitar esta costumbre, todavía sólo en la Región Metropolitana. En la década de 1930 comienza su oficio el chinchinero vivo más antiguo en la actualidad, don Héctor Lizana Gutiérrez ([1]), quien conoció a don Lázaro Kaplán. Fue don Héctor quien inventó el baile del chinchinero tal y como lo conocemos (antes algunos chinchineros hacían tímidos movimientos, pero no un verdadero baile) a fines de la década del 30. Por ejemplo, la costumbre de pasar el pie entre la cuerda que acciona el hi-hat es invento de él.
En la década de 1960, se conoce en Valparaíso la existencia de estos hombres-orquesta que acompañaban al organillo por medio de los rumores que hablaban de un niño que tocaba el chinchín. Este niño era don Manuel Lizana Quezada, hijo de don Héctor. Posteriormente el chinchinero santiaguino conocido como "Patito" es quien lleva el chinchín a Valparaíso en esa misma década del 60 y es así como los chinchineros comienzan a acompañar a los organilleros de aquella ciudad. Los chinchineros de Valparaíso tocaban el chinchín con una sola varilla y no pasaban el pie entre la cuerda del hi-hat ni daban vueltas. Fue con la visita de los Lizana el año 1962, los que fueron llevados por el organillero porteño Gustavo Muñoz, que los chinchineros de Valparaíso adoptaron (al principio, reticentes) estas técnicas y el uso de 2 varillas en vez de una.
Antiguamente, el organillero era acompañado por otros personajes como el fotógrafo, el suplementero, el afilador de cuchillos, el farolero que indicaba la hora. "La historia del instrumento es muy interesante. A fines del siglo XIX llegaron 300 organillos a Valparaíso. El chinchín se desarrolló después, basado en la idea del “hombre orquesta”. De hecho, trabajaron juntos, pero cada uno encontró su camino. Es gracioso saber que, por ejemplo, antes había grandes peleas entre ellos para decidir quién guardaba la plata. Pero lo realmente interesante es saber que el chinchín es único en el mundo y que los extranjeros se impresionan mucho cuando ven a un ejecutante", nos cuenta Peter Estay [2] A medida que pasó el tiempo, cada personaje se fue independizando. El fotógrafo se quedó en las plazas, el que daba la hora desapareció por razones obvias: se masificó el reloj. El Afilador de cuchillos siguió solo por los barrios y de igual forma lo hizo el organillero. Sólo el organillero y el chinchinero continuaron trabajando como grupo, representando la cultura y tradiciones del pueblo chileno.
* con información de: es.wikipedia.org/wiki/Chinchinero *
______________________
Historia de la Familia Lizana
* con información de la página: www.organillolizana.cl *
* La historia de la Familia Lizana en el oficio comienza con Don Héctor Lizana Gutiérrez, quien en el año 1936 acompaña a un organillero vendiendo pelotas de aserrín por las calles y plazas de Santiago de Chile. En el año 1938, Don Héctor pasa a tocar el chin-chin. En ese andar conoce a su mujer, la Señora Graciela Quezada y con la cual contrae matrimonio a mediados del año 1946. De esa unión nace en 1949 su primer hijo Don Manuel Lizana Quezada.
En el 53 Don Héctor obtiene su primer organillo el cual trabajaba con su hijo Manuel, quien además tocada el organillo para que su padre las hiciera en el chin-chin. Cuando el niño ya tenía 12 años comienza a tocar y a bailar con el chin-chin.
En el año 1955 nace el segundo hijo de Don Héctor, Juan Lizana Quezada quien en el 69 ocupa el puesto de organillero formándose el trío “Guardia vieja”, con este hecho se forma la segunda generación.
Don Héctor a través de los años aprendió a darle mantención a su organillo y ese conocimiento se los fue traspasando a su hijo Manuel. Desde entonces los sueños de Manuel fueron ser el restaurador de organillos.
Manuel Lizana cumplió el servicio militar en Valparaíso en el año 1969, allí conoció a Marta Hidalgo su esposa. Al conocer la familia de la señora Marta se llevó la sorpresa de que el esposo de su hermana, Don Pedro Castillo, era también organillero formándose así una gran familia de artistas.
Con el tiempo Manuel Lizana cumplió su sueño de ocupar el puesto de maestro de organillo como también lo era Don Enrique Venegas, quien en 1984 lamentablemente falleció, quedando Manuel como el único reparador en Chile.
Sus primeras reparaciones fueron en 1978.
Actualmente Manuel y Marta tienen tres hijos llamados Cecilia Lizana H. (1970), Manuel Lizana H. (1971) y Héctor Lizana H. (1977).
Manuel Lizana Hidalgo de la tercera generación salió junto a su hermano Héctor Lizana Hidalgo con solo 12 y 7 años respectivamente a trabajar en la calle. Manuel con el organillo y Héctor con los remolinos y las chicharras. Hoy en día estos hermanos han pasado a ser ayudantes de su padre en el taller familiar de reparación y construcción de organillos.
En 1991 crearon su primer organillo y hasta la fecha, ya levan cerca de 10 unidades terminadas.
Manuel Lizana, gracias a su constante trabajo se ha podido dar a conocer dentro otros países como México y Alemania, viajando en varias oportunidades al país del norte en calidad de “Maestro de organillos” para reparar algunos ejemplares que allá se encuentran.
En 2004 con el apoyo de Marianela Riquelme, Agustín Ruiz y Arturo Torrealba se logra contacto con los luthieres de Alemania los Señores Jager y Brommer quienes se interesaron por estos restauradores, organilleros y su oficio en general. Entonces surgió el viaje al país europeo gracias al apoyo, además, del MINISTERIO DE CULTURA Y LA DIRAC. El viaje fue todo un éxito, tuvieron la oportunidad de conocer cuatro museos, generando un intercambio de visiones con los luthieres Alemanes y la posibilidad de saber más del primer fabricante de organillos del mundo, el señor Bruder de vivió por los años 1720.
La familia Lizana, prolongadamente le hace una invitación a Chile al Señor Brommer, para mostrarle la corporación de organilleros y el taller de Manuel Lizana, recibiéndolo con una gran exposición en el museo Casa Colora de Santiago luego de otra muestra realizada en la Ciudad Puerto de Valparaíso. De esta actividad se desprende la invitación hecha por el alemán hacia don Manuel Lizana, su hijo Héctor Lizana y el presidente de la corporación de organilleros de Chile don Manuel Lara a la más grande muestra de organillos en Alemania el año 2005.
Gracias a ese viaje se recogieron grandes enseñanzas, las cuales has servido para seguir mejorando nuestro oficio y que esperamos sea cada día sea mejor.
* con información de la página: www.organillolizana.cl *
__________________________________________
Comentarios